Basta

En definitiva, tengo un móvil con 2000 fotos guardadas y otras miles en mi ordenador, tengo cientos de vídeos y cientos de notas de voz que reflejan infinidad de encuentros, de visitas y personas que han pasado por mi vida, pero sorprendentemente, los mejores momentos los guardo en mi memoria.
No hay una sola foto de ese beso precipitado y acertado, no guardo un retrato de un brindis por la vida, ¿te acuerdas? No veo un solo vídeo de aquel momento en el que todos mis amigos y yo le sonreímos a la vida y no tengo en fotos, ninguna de las veces que me abrazaste y me hiciste olvidar el mundo. No encuentro un recuerdo fotográfico de mi cara cuando me dirigía a esa cita con el chico que me imponía lo suficiente como para dudar hasta de mi nombre. No guardo ningún vídeo de aquellos abrazos en los que he dejado mi vida, o aquellos que he dado tan fuerte que más de una vez creí abrazar el alma, aunque quizás lo que hacía era abrazar con la mía. No tengo una foto del día en el que decidí dejar atrás al primer chico que me hizo sentir algo, ni tengo un vídeo de esos mil veranos de un solo día. No recuerdo hacerme un selfie cuando lloraba por amor, ni de retratarme un domingo lluvioso de peli y manta. Y mucho menos he encontrado un solo vídeo que refleje cualquiera de los valores morales que represento.
Sin embargo cierro los ojos y puedo ver todos esos días.
La cara de el en nuestra primera cita, la primera vez que le dije “te quiero”, mi primer beso con el amor de mi vida y mi último beso con mi gran error, la sonrisa de mis amigos y amigas cuando se alegran por mi, todos mis momentos de complicidad, la felicidad de mi familia y el orgullo que sienten por mi, porque confían en que llegaré lejos. No tengo ninguna foto ni ningún vídeo para demostrar quien soy yo, quizás eso es algo que se descubre con el tiempo.
Al final la vida se basa en eso, en recordar lo que has sido y eres, y no borrar de tu memoria, todos esos momentos, situaciones y personas que te han hecho ser, feliz o infeliz, pues el dinero se gasta, la salud se deteriora y el amor es indescifrable, pero tu vida estará en ti, hasta que tu memoria diga basta.

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