La madre perfecta.

Claudia se enteró de que esa noche habría una fiesta, Harry, el chico que le gustaba le dijo que fuera con el y ella no consiguió decirle que no, a pesar de que la pequeña sabia que su madre no le dejaría ir porque seria peligroso, pero últimamente Claudia estaba diferente, no le hacia caso a su madre, a pesar de que esta estaba enferma, además se juntaba con gente extraña y misteriosa, aparte del peligro que corría al salir con esa gente.
Claudia llegó a casa tarde, ya que había ido a clases particulares, entró y su madre estaba en el sillón viendo la tele, el padre no había llegado aún, a pesar de que ya era tarde. Claudia decidió preguntarle a su madre lo de la fiesta, sí, recuerdo esa discusión...

+¿Mamá puedo ir mañana por la noche a una fiesta?
-Claudia cariño, sabes que no me gustan esas cosas..
+Ya mamá pero me hace mucha ilusión de verdad, por favor
-Claudia hija quédate en casa...
+¿Eso es un no?
-Claudia mejor no ¿vale?
+No joder en esta casa siempre es lo mismo, todo esto es una puta mierda, y tu también lo eres!! te odio ojalá te mueras, así todo seria mas fácil, aquí nadie te necesita, no lo entiendes joder lárgate ¡¡¡¡ya!!!!
-Claudia ven aquí, Claudia! 

Claudia subió a su cuarto y dio un portazo, se tiro en la cama y lloro toda la tarde.

(((RIIIIIIIIIIIIIIING RIIIIIIIIIIIIIIIIIIIING)))

Claudia estaba desconcertada, y recordó que esa noche era la fiesta, pero ella tenia que ir si o si, había quedado con Harry a las ocho fuera de su casa, y ya eran las tres de la tarde, pero antes necesitaba un vestido, salio de la habitación y su madre aun dormía, así que bajo, cogió la cartera de su madre y saco cuatro billetes de 500 que su madre tenia allí, ya que el vestido con los zapatos y los accesorios que a ella le gustaban salían 1700, y los otros 300 los usaría para ir a una buena peluquería y la manicura y el maquillaje.
Así mismo lo hizo, llego a su casa a las siete, con una hora de sobra. Claudia entró a su casa;

-Claudia ven...
+¿Qué quieres mamá?
-Claudia cariño, no me encuentro bien, por favor no hagas ninguna locura, hoy estoy más mareada que otros días, acuéstate pronto.
+Que si pesada...

Subió, entro a la habitación y se miro al espejo, directamente vio un mensaje de Harry, el le decía que iría a buscarla a las siete y veinte, así que Claudia salio de la habitación y vio a su madre sentada en el sillón, igual que antes, (genial pensó ella), y saltó por la ventana de su habitación, se encontró con Harry y se fueron a la fiesta.

(((YOU GONNA TIMEBOMB YEAH YEAH UOOOOOO)))

La música estaba muy alta, y el alcohol estaba por todos lados, también gente en el suelo, en los sillones había todo tipo de sustancias y los baños muy llenos.
Claudia empezó a beber, Harry le daba una copa tras otra. Cuando la chica se dio cuenta, estaba en el baño, y Harry la besaba, Claudia intentó forcejear, pero el chico tenia más fuerza, no podía, sentía que le iba a estallar la cabeza, Claudia se desvanecía, se caía en un agujero negro del que no podría salir si seguía en esa situación de la que tarde o temprano se arrepentiría.
Algo no iba bien, ella tenia el presentimiento de que algo no iba bien, la chica empujó a Harry y salió corriendo, como pudo, salio fuera de la casa, cogió el móvil y llamó a su madre, pero nadie contesto, la angustia crecía y Claudia lloraba, más y más. Empezó a caminar hacia su casa, quedaba un poco lejos, mientras caminaba, un par de coches de policía y una ambulancia pasaron rápidamente en dirección de su casa, Claudia volvió a llamar, llamo tanto que le sonó el contestador, la chica nunca había sentido esa angustia, salio corriendo hacia su casa, no había pasado ni media hora y claudia estaba en su casa, de lejos vio los coches de policía y la ambulancia fuera de su casa, fue corriendo y un policía la paró en la entrada, y le dijo que no podía entrar. Claudia rompió a llorar, ella sabia que no debía haber dejado a su madre sola, pero lo hizo, le dijeron a Claudia que su madre estaba en el hospital muerta, ya que la operación costaba 2000 euros que su madre había jurado que estaban en su bolso, en una cartera medio saliendo.
Por un estúpido capricho, la última palabra que Claudia le dijo a su madre fue PESADA, a una mujer que dio su vida por ella y que se preocupaba por su seguridad, una mujer que nunca pretendió hacerle daño a su pequeña Claudia, a pesar de que Claudia le deseaba la muerte a su madre, ya hora ella esta lejos, muy lejos, FAR, FAR AWAY.


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