...

Nos queríamos,
de verdad,
nos queríamos.
Días nos quisimos más,
días que la verdad
algo menos,
incluso por haber,
hubieron días que nos quisimos
a Neruda y al florecer de sus cerezos.
Nos queríamos
dentro y fuera de la cama
nos queríamos bien
y nos quisimos muy mal.
Días nos odiamos
días peleamos,
discutimos,
y días nos rechazamos al querernos,
pero otros…
otros arreglamos el mundo
tan solo con mirarnos.
Nos queríamos
como siempre nos quisimos,
de una manera inusual,
diferente,
a libros y a cartas,
a noches en vela,
y veces nos quisimos
a la antigua.
Nos quisimos en silencio
nos quisimos,
o quizás
tan solo yo te quise.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Si tengo que pedírtelo ya no lo quiero.

Amor purgatorio