Hoy no quiero ni irme,
ni quedarme
no quiero permanecer escondido
ni estar a la espera
no quiero ser esas copas de más 
ni quiero ser ese beso robado al alba
que mañana pase a ser sombra de un recuerdo.
No quiero ser marca
ni punto ni coma en el libro de notas que guardas en tu escritorio.
No quiero ser nada.
Hoy simplemente,
no me llames
pero si por casualidad
el marrón de tus ojos
anhela algo de los míos,
algo de mi espalda
de mis largos dedos
del moreno de mi piel
de mis brazos
mis silencios
y mis labios
hazlo,
pero hazlo con ganas.

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