TU DECIDES

Lo que pasa es que el amor se recobra dando sorpresas, demostrando cariño y enseñando que no todo esta perdido, escuchándola, mandando un sms a la madrugada, diciendo las cosas que realmente piensas, porque si echas de menos algo, demuéstralo, quizás puedas arreglarlo ahora, pero no puedas arreglarlo después.
Vas a perder una estrella mientras coleccionas piedras, quizás no es una estrella sino un diamante, tu sabes que puede haber personas que te querrán mucho, mas guapas y mas simpáticas pero lo que vives con una persona no se repetirá, todo el mundo merece una segunda oportunidad, aunque tu decides quien merece 2384689124 oportunidades, y quien realmente merece tu perdón.
Sabes también que hay infinitos mas grandes que otros, solo debes decidir con quien caminar el pequeño gran infinito que posees, debes decidir a quien abrazar, a quien sonreír, a quien mirar, las cosas no se repetirán dos veces en la misma vida exactamente iguales, como decían los filósofos presocraticos; porque la vida esta en continuo cambio y no puedes bajar el mismo río dos veces ya que hay cosas que solo ocurren una vez, y entonces lo sientes, ocurre, algo se acciona y sabes que las cosas ya no volverán a ser como antes, y debes decidir si seguir creando recuerdos al lado de la persona que un día dijiste amor; debes decidir si arreglar las cosas o elegir el olvido, el olvido es la manera mas triste y mas dolorosa de olvidar a alguien o de terminar una relación, y es el camino que toman la mayoría de parejas, cometiendo un error que mas tarde lamentarán, y, ¿sabes que? en ese preciso instante también debes decidir si ser tu el que la abraza, la mima, y la hace feliz, o si eres tu el que la ve en brazos de otro, sonriendole a otro, poniéndose las camisas y las chaquetas de otro, besando los labios de otro, creando nuevos recuerdos con otro, solo tu puedes decidir si arreglar la maquina de recuerdos que TU dejaste en ruinas, o dejar que la arregle OTRO.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Si tengo que pedírtelo ya no lo quiero.

Amor purgatorio